Hoy he hecho mi primera clase en la facultad de letras de Saarbrücken! Pero esto no ha sido ni por asomo lo más notable que ha pasado este día… Gracias a las indicaciones que me dieron antes de entrar en clase, luego salí de la facultad y fui directamente a la parada del bus, sin dudar ni preguntar a nadie. Luego me subí al bus y fui de la parada del bus a la residencia.
Sé que para muchos de vosotros esto será un hecho poco significativo, pero para una persona invidente como yo que siempre ha tenido complejos de falta de orientación, es un gran avance. Más que nada porque es la primera vez que voy a esa facultad y no me conocía nada de nada del camino.
Lo que quiero decir con esto es que, siempre hay que mirar las cosas en positivo y hoy lo he comprobado… Siempre que me he puesto nervioso para ir a un lugar nuevo, me he equivocado y he tenido que preguntar. Aun siguiendo las indicaciones de este compañero y así evitando ponerme nervioso, he llegado bien donde quería. La persona a la que le he preguntado, y me ha confirmado que la parada del bus en la que estaba era la correcta, se debió quedar flipando al ver la enorme sonrisa dibujada en mi rostro.